Por Mauricio Díaz. El gobierno provincial sigue sin atender a la madre, mientras organismos de Derechos Humanos a nivel nacional se hicieron presentes en la marcha realizada a finales de la semana pasada. El caso de Facundo, el “Rubio del Pasaje”.
Desde Colón y Cañada, en Córdoba Capital, salió la columna. “No queremos mano dura, no queremos represión, queremos para los pibes, trabajo y educación.” Eso es lo que se escucha mientras avanza la marcha en conmemoración por el año y medio de la desaparición de Facundo Rivera Alegre, el “Rubio del pasaje”. En febrero de 2012, después de salir de un baile de Damián Córdoba, Facundo (según varios testigos) fue subido a la fuerza a un patrullero y no se supo más de él.
El Caso
Hay varias hipótesis sobre la desaparición de “El Rubio”, una de ellas es el supuesto ajuste de cuentas narco. A Facundo se lo buscó por los Barrio San Vicente y Maldonado, en lagunas y baldíos. Vecinos del barrio dicen haberlo visto por la zona esa madrugada. En contrapartida es sabido que si un grupo narco realiza un ajuste de cuentas, dejan visible el cuerpo, a modo de señal, para quien va dirigido el mensaje.
Hace unos meses atrás el matutino más reconocido de Córdoba, publica la versión más absurda y dolorosa, es la de la sobredosis, la cual es solamente comprensible si se encuentra el cuerpo. Parece más afín a la versión policial, que quiere instalar a la víctima como victimario, que a la intención de buscar la verdad.
La más firme y a la que sostiene la madre y la familia de Facundo, es la del abuso policial. “El Rubio” era asediado constantemente por la policía, nunca tuvo antecedentes, solo entró por contravenciones. La hipótesis que sostiene la familia, es que en el abuso de autoridad, a la policía se le fue la mano.
¿Qué fuerza en la sociedad actual, tiene el poder de fuerza, de represión y la posibilidad y habilidad de poder ocultar sus crímenes?
La investigación en este año y medio no avanzó, “solo fueron amagues”, según Viviana Alegre, “La justicia sabe ¿quiénes?, ¿dónde? y ¿cómo? Fue el hecho”, Alegre así da a entender que la falta de voluntad policial, judicial y política, impiden que el caso se resuelva.
El Rubio
El caso de Facundo Rivera Alegre, se convirtió en un motor para que la sociedad se interpele. Lamentablemente tuvo que desaparecer Facundo para que el cordobés conozca la peor cara represiva del Gobierno Provincial. “El Rubio”, le puso cara a una realidad que los pibes de los barrios marginales sufren diariamente (retenes y controles en los puentes, detenciones en las calles sin ningún motivo aparente, etc.). Tuvo que suceder lo de “El Rubio”, para que la peor cara del “cordobesismo” -concepto utilizado por el “delasotismo” para caracterizar sus políticas en la provincia- salga a la luz. Un Estado represivo que castiga y somete a la pobreza y la marginalidad. Dando así una cara, mostrando una fachada pulcra a nivel nacional que intentan lanzar a su gobernador a la presidencia.
También abre el debate sobre uno de los Códigos más polémicos, el Código de Faltas, que rige en toda la provincia de Córdoba desde el año 1994, pero que en los últimos recrudeció su aplicación. Según un estudio de la CECOPAL, publicado en el 2012, en Córdoba Capital se produce un arresto cada 13 minutos, bajo las condiciones que establece el Código de Faltas. En las calles cordobesas los más hostigados son varones de entre 18 y 25 años, de barrios marginales.
“Con este caso queda en evidencia un sistema de criminalidad que está encubierto por la policía. Da cuenta de la estructura política corrupta que hay en Córdoba”, sostuvo el abogado querellante Carlos Orosz.
Viviana Alegre hace un año y medio que busca y peticiona para que José Manuel De la Sota la reciba. “Se ve que hay gente de afuera que tiene más datos que nosotros, desde la fiscalía se filtra, por decirlo de alguna manera, y la policía también, intentando desviar el tema para no tener responsabilidades. Ni desde el municipio ni desde el gobierno provincial jamás recibimos ni un llamado, absolutamente nada”. El gobernador de la provincia nunca le respondió a los pedidos de audiencia.