Por Anahí Ramos. La Ley Nacional de Educación perjudica también a las instituciones de terciarios y profesorados. El ejemplo de la lucha por la comunidad educativa del Joaquín V. González, uno de los principales espacios de formación de docentes medios y superiores a nivel nacional.
Las puertas del Palacio Pizzurno ayer estaban ocupadas en defensa de la educación pública. Más de doscientas personas se movilizaron con carteles y pancartas en las que se leían consignas como “Yo defiendo la educación pública” y “Yo defiendo al Instituto Autónomo Joaquin V. González”.
Se trataba de los estudiantes, docentes, administrativos y graduados del ISP Joaquín V. González, que mientras sostenían un corte por siete horas ininterrumpudas en la esquina de Paraguay y Rodríguez Peña, se manifestaban frente al Ministerio de Educación nacional acompañando la primera reunión política con representantes de las carteras del sector nacional y porteño.
En diálogo con Marcha, Nuria Illán, integrante de la Secretaría General del Centro de Estudiantes del JVG dijo: “Hoy nos movilizamos como comunidad educativa rechazando las reformas que quieren imponernos tanto desde el Ministerio de Nación como de Ciudad y que afectan a nuestro Reglamento Orgánico Interno y a nuestros planes de estudio. Por un lado, desde el Consejo Federal de Educación y desde el ministerio de ciudad nos bajan un nuevo Reglamento Orgánico Marco que le quita al instituto su autonomía”.
Además de modificar los órganos de representación en la institución, dando por terminada la paridad de representantes entre estudiantes y docentes, la pérdida de la autonomía también afectará sobre el derecho a decidir, entre otras cosas, reformas en planes de estudio y contenidos curriculares. “El objetivo principal del nuevo reglamento es que el Joaquín ya no pueda tener una injerencia decisiva respecto a sus diseños curriculares, para así poder imponernos las reformas que se desprenden de la Ley Nacional de Educación, la cual establece que debe haber un diseño curricular único por carrera”, agregó Nuria.
El del Joaquín no es un conflicto aislado, sino que está enmarcado en una serie de reformas que van en detrimento de la educación pública y popular frente al avance de la educación privada. Se origina con la promulgación de la Ley Nacional de Educación, la misma que protagoniza las discusiones que se vienen dando en los colegios secundarios y en las universidades.
En el nivel terciario y de formación docente lo que está en debate es quién fija la política educativa de los estudios para profesorado. Esto se expresa en cómo se organizan los concursos docentes, las ayudantías estudiantiles, las formas de gobierno, la representación de los claustros, la creación de postítulos, seminarios y carreras, la apertura de cátedras y de distintos turnos para las cursadas. “Lo que está en juego es si todo esto que es parte esencial de la identidad del Joaquín V. González va a seguir siendo dependencia de su comunidad educativa o si serán los funcionarios de cada gobierno de turno los que puedan definir a su antojo”, concluyó Nuria.
Cómo sigue
Manuel Díaz es estudiante del profesorado y consejero directivo por parte de La Caravana de la Izquierda Independiente, un espacio integrado por el Frente Popular Darío Santillán y Marea Popular.
“La reunión de hoy fue importante porque nos permite visualizar con mayor claridad dónde estamos parados y cómo están pensando este conflicto las autoridades de ambos ministerios”, comentó Manuel.
Se acordó con los funcionarios una nueva fecha de encuentro, dentro de 10 días. Allí volverán a defender el reclamo, para ello apuestan a hacer más sólida la unidad.
“La comunidad educativa del Joaquín V. González está unida y esa es nuestra mayor fortaleza”, afirmó Manuel y agregó “tenemos claro que no vamos a bajar los brazos hasta que respeten nuestra autonomía y nuestra forma democrática de gobierno condensada en el consejo directivo”.