Polémica en Estados Unidos por la iniciativa del ejecutivo de restringir la tenencia de armas en manos de civiles después de la masacre de Connecticut que dejara como saldo 27 muertos.
El gobierno de Estados Unidos se reunirá esta semana con partidarios y opositores a la libre tenencia de armas de fuego en un intento de reducir los ataques que causan alrededor de 30.000 muertes por año. El debate se renovó luego del ataque realizado en diciembre a la escuela Newtown de Connecticut por un joven de 20 años que disparó con un fusil de guerra matando a 27 personas, 20 de los cuales eran niños.
Tras la tragedia, el ejecutivo prometió medidas concretas de control, tema controvertido en un país donde el derecho a tener armas está garantizado por la constitución. Con este objetivo en vista, el presidente Barack Obama solicitó al congreso que restaure la prohibición a la venta de armas semiautomáticas de tipo militar y de cargadores de alta capacidad que estuvo vigente entre los años 1994 y 2044
A su vez, Obama puso al vicepresidente Joe Biden al frente de un grupo de trabajo cuyo objetivo es elaborar y presentar, antes de fin de mes, una propuesta que intente solucionar la violencia con armas de fuego en la sociedad civil.
Las reuniones planeadas por el grupo de trabajo incluyen a ciudadanos que poseen armas de fuego, grupos de víctimas de la violencia y tiradores deportivos. Asimismo, esta prevista una reunión con la Asociación Nacional del Rifle (NRA), la organización más poderosa en el lobby pro armas en el país del norte y que se opone a incrementar los controles gubernamentales.
“Mandaremos a un representante para escuchar lo que tienen para decir”, afirmó un vocero de la NRA en cadenas de televisión, pero a la vez aseguró que resistirían cualquier esfuerzo por limitar la tenencia de armas luego de la masacre de Newtown y propusieron como solución poner guardias armados en los colegios.
A la campaña oficial se sumó la ex legisladora demócrata Gabrielle Giffords, quien fue herida de un tiro en la cabeza durante un acto político en enero del 2011 en un ataque que dejo seis muertos y doce heridos y luego del cual la congresista debió aprender a hablar y caminar nuevamente.
Giffords declaró en un artículo publicado en el USA Today que desde ese ataque hubieron once tiroteos masivos en Estados Unidos y que aun así el congreso no tiene respuestas contundentes para frenar la violencia. Ante esto, anunció la creación de una organización y una página web que tiene como objetivo impulsar reglas más estrictas para la tenencia de armas.
“Estadounidenses en Busca de Soluciones Responsables, el sitio web que lanzamos, invita a la gente de todo el país a que participe en esta conversación nacional sobre la prevención de la violencia y sobre cómo recaudar los fondos necesarios para equilibrar la influencia del lobby de armas”, aseguró.
En paralelo a esta polémica, cerca de una decena de asociaciones de defensas de las armas llamaron a los estadounidenses a celebrar el día de los amantes de las armas el próximo 19 de enero y convocaron a los ciudadanos a acudir en masa a las armerías en esa fecha para apoyar su causa y defender su derecho a portar armamento.
Las asociaciones denominaron el 19 de enero como la “Jornada de Reconocimiento de las Armas” y esperan recibir el apoyo de alrededor de 50 millones de personas en todo el país, dos días antes de la asunción de Obama para su segundo mandato.
EL presidente de la iniciativa, Larry Ward, afirmó en su página web que “la administración de Obama ha demostrado que pretende pisotear la constitución para imponer sus dictados al pueblo estadounidense, refiriéndose a las declaraciones del presidente en las que expresaba la necesidad de controlar el acceso abierto a las armas que existe en el país.
En la misma sintonía, el creador de la Fundación por la Segunda Enmienda, Alan Gottlieb, aseguró que lo que se debe prohibir es “los políticos que atacan nuestros poderes, no las armas utilizadas para proteger y bienes de los ataques criminales”.
Esta fundación reivindica la Segunda Enmienda a la Constitución de los Estados Unidos de América, aprobada en 1791, la cual da el derecho a los civiles a la posesión de armas.