Antes del comienzo de la feria judicial, se desarrolló en Comodoro Py la última audiencia por el caso del asesinato de Mariano Ferreyra. El matutino Con el pie izquierdo, entrevistó a su hermano, Pablo, un militante social que se ha puesto al hombro la lucha contra la precarización laboral.
A casi cuatro meses del comienzo del juicio por el asesinato del militante del Partido Obrero, Mariano Ferreyra, en el que están imputados sindicalistas, barrabravas y policías, ayer se realizó una de las últimas audiencias del año, antes del comienzo de la breve feria judicial que interrumpirá por algunas semanas su desarrollo. Se espera que antes de fin de año, o a mediados de enero, declare en el mismo José Pedraza, titular de la Unión Ferroviaria (UF) al momento en que una patota de sindicalistas y barrabravas disparó y asesinó al militante que estaba participando de una manifestación contra las tercerizaciones en el Ferrocarril Ex Roca. El programa Con el pie izquierdo, emitido por Radio Sur, dialogó con Pablo Ferreyra, su hermano, quien realizó un balance de los avances durante el proceso judicial y resaltó la importancia de poner en discusión, como lo hacía Mariano, el problema de las tercerizaciones y la precarización laboral.
-¿Cuál es el balance de lo que ocurrió durante el juicio este año?
Tuvimos una primera etapa donde tuvimos que avanzar en la discusión sobre el enfrentamiento, que es lo que se quería imponer desde la defensa. Superado eso, logramos tener, desde mi punto de vista, un completo dominio del relato de lo que sucedió en el lugar que fue cómo un grupo armado de la Unión Ferroviaria (UF), buscó aleccionar a los trabajadores tercerizados que estaba buscando poner en jaque la hegemonía política y en el fondo económica que estaba imponiendo Pedraza a través de la tercerización. Eso fue una primera etapa del juicio.
Hoy [por ayer] escucharemos el testimonio de Pablo Villalba que es uno de los últimos testimonios presentados por la querella, un tercerizado de la línea ex Roca que es militante del PTS. Lo que va a decir sirve para mostrar el motivo del asesinato de Mariano, que fue sostener el sistema de tercerización en el Roca. Se nos ocurrió invitar a compañeros, amigos de la izquierda independiente, que vengan compañeros de Marea Popular, del Gleyzer, de Metrodelegados, van a venir compañeros de HIJOS, de la Agrupación 2021, etc. La idea es que este espacio político que se empieza a referenciar esté acá presente, vinculando también el tema de la precarización, la tercerización, con la presencia de Roberto Pianelli, tomando el ejemplo del Sindicato del Subte que ha logrado que el Subte absorba a los tercerizados en su interior y que han pasado todos a planta. Es lo que sería el ejemplo del sindicalismo antiburocrático y progresivo, frente a las maniobras de lo que vamos a ver hoy del sindicalismo empresario, como la UF, que no tiene problema en echar mano a armas de fuego para dirimir conflictos y avanzar con la precarización.
– ¿Cómo se retoma el proceso judicial el año que viene? ¿Qué expectativas hay?
Quedan etapas del juicio más bien periciales, por eso el acento está puesto en los testimonios de hoy. Retomaremos a mediados de enero, con algunos testimonios más que faltan y entraríamos ya en la etapa de alegatos. Son muchos, probablemente eso lleve más de un mes. Quizás en marzo, con suerte, tengamos la sentencia definitiva en este juicio que buscamos que sea la perpetua a José Pedraza, como máximo responsable y de ahí ir viendo para abajo todas las penas. Concretamente, esperamos que los que dispararon y algunos miembros de la patota van a tener también la pena máxima. Con tres cuartas partes del juicio hecho, podemos afirmar que ha caído por tierra la teoría del enfrentamiento, hemos visto como Pedraza está involucrado en una cantidad de negociados impresionantes. Siendo optimista creo que vamos a tener una condena ejemplificadora el año que viene.
– Recientemente se realizaron elecciones en la Unión Ferroviaria, ¿crees que eso influyó de alguna forma en el juicio?
Quizás ver ahora a Pedraza sin estar a la cabeza de la UF puede llegar a tener alguna influencia. Políticamente me parece que era de esperar que, si bien Pedraza ya había dicho que no iba a presentarse a las elecciones, la Lista Verde iba a seguir existiendo, y el que está ahora conduciendo el sindicato no deja de ser un ex pedracista, ex moyanista, alguien con vínculos muy estrechos con el riñón de la burocracia sindical, no va a cambiar demasiado la situación en la UF. Sí es un golpe muy duro para Pedraza que ya no esté ahí, y pierde más hegemonía política. Estamos llegando a un juicio donde Pedraza llega con una condena social de antemano muy grande. Es un ejemplo del sindicalismo empresario, de la mafia de los ferrocarriles, de la corrupción. Pero el tribunal parece no influenciarse mucho con lo que pasa afuera. Cuando desapareció Severo, creíamos que iba a enturbiar un poco el juicio, porque sus declaraciones públicas fueron bastante confusas. Pero eso terminó no sucediendo. Esto parecería ser una contra, pero creo que se influencia de otras cosas, mejores, entre ellas, la presencia de la movilización, de los compañeros, que hoy [por ayer], va a dejar una marca muy fuerte y definitivamente el tribunal va a entender que la condena social que hay afuera tiene que traducirse en una condena efectiva hacia Pedraza.
– El asesinato de Mariano, sin duda, ha conmocionado al país ¿Se lo puede considerar como un punto bisagra en la política argentina? ¿Qué cosas ves que cambiaron desde entonces y cuáles son las deudas pendientes?
Cosas que cambiaron, no fueron muchas. Pero cosas que no cambiaron, sí. Por ejemplo, el modelo sindical sigue sin discutirse. Sindicalistas ligados a actitudes empresarias y de cooptación por parte de los empresarios siguen existiendo. Lo que trae el asesinato de Mariano es la visibilidad a la problemática de la tercerización, eso es una brecha interesante para explotar. Nos coloca en una oportunidad única. Un marco histórico que nos permite discutirle la agenda al gobierno, en este caso el debate sobre el trabajo digno y la precarización. Me parece que a partir de esto vamos a poder hacer una campaña y mostrar que la cara más atroz de la tercerización puede ser el asesinato de un militante popular que estaba en contra de ella y cómo podemos avanzar progresivamente hacia la prohibición de la tercerización, como en muchos países de Latinoamérica, como Venezuela y Ecuador donde está regulada. Esto es lo más interesante. Con este caso también se visibiliza la problemática de la violencia institucional. Cómo la policía utiliza todos los recursos del aparato represivo para avanzar sobre jóvenes en los sectores populares que identifica como el enemigo interno. Creo que hay elementos para pensar el asesinato de Mariano en esos términos. Hay que tener una mirada no sectaria, hay que jugar en el marco que nos encontramos, porque, por ejemplo, en el 2015 con un gobierno más de derecha va a ser imposible conquistar algunas cosas. Creo que este es el momento para buscar estas reivindicaciones que, a veces, pueden pecar de reformistas, pero para los trabajadores en conjunto va a ser un avance importante si logramos terminar con la tercerización o, por lo menos, lograr regularla para que no existan estas formas precarizantes del trabajo.