Un docente de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires (UBA) fue suspendido de sus funciones por estar imputado en una causa por crímenes de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura.
A fines del mes de octubre la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, a través de su abogado en Salta, Martín Ávila, presentó una denuncia contra el profesor de la Facultad de Psicología de la UBA, Mario Casalla. La misma se hizo ante el Juzgado Federal Nº 1 de la ciudad de Salta, a cargo del juez Julio Leonardo Bavio.
En la presentación judicial hecha por Ávila se requiere que el docente de la UBA sea indagado como presunto “autor mediato de la privación ilegal de la libertad del profesor Miguel Ángel Arra”, secuestrado el 24 de junio de 1975, fecha desde la cual permanece desaparecido. El profesor Arra había sido cesanteado tiempo antes por Casalla, que en aquellos años cumplía las funciones de Secretario Académico de la Universidad de Salta (UNSa).
Esta imputación se da en el marco de la causa que investiga la desaparición del ex gobernador de esa provincia, Miguel Ragone, el 11 de marzo de 1976. En el legajo de este caso figuran declaraciones de Casalla del mismo año que dieron pie a la actual presentación judicial.
Ante la cesantía que le impusieron las autoridades militares que intervinieron la UNSa en 1976 el Profesor Mario Casalla declaraba que esto era un error porque “ya en el gobierno universitario, durante los años 1974 a 1976, procedí a depurar ideológicamente el departamento más conflictivo e infiltrado subversivamente de la universidad, el Departamento de Humanidades, dí de baja a docentes directamente ligados a la subversión (puede solicitarse la nómina en la Secretaría Académica de la UNSa), revisé y promulgué nuevos planes de estudios, dejando de lado los anteriores contenidos marxistas… de todo ello tienen constancia los organismos de seguridad de la Provincia y muy especialmente la Policía Federal (delegación Salta)”.
La UBA se hizo eco
El día lunes 14 de noviembre, el Consejo Directivo de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires (UBA) resolvió suspender al profesor Mario Casalla de sus cargos al frente de las materias “Problemas filosóficos” e “Historia de la psicología”. Esta suspensión permanecerá vigente hasta que se resuelva la situación judicial que lo imputa como presunto participe en la desaparición forzada de personas durante la última dictadura.
La consejera por la minoría del claustro de graduados presentó el proyecto que fue acompañado por todos los representantes estudiantiles y finalmente por el conjunto de la comunidad académica de la Facultad de Psicología. La propuesta de suspensión también contaba con el aval de la Asociación Gremial Docente (AGD).
Ileana Celotto, la consejera que presentó el proyecto y miembro de AGD, declaró a Marcha que el objetivo era que “Mario Casalla sea separado de sus cargos hasta que se resuelva la situación judicial”. También sostuvo que presentaron otro proyecto para que la UBA le inicie un juicio académico y lo suspenda definitivamente de sus funciones en caso de ser encontrado culpable. Este último proyecto sin embargo no fue tratado en la sesión y fue pasado a comisión por lo que habrá que esperar por lo menos dos semanas hasta que vuelva al consejo para ser votado.
Por otra parte Celotto sostuvo que “desde la Secretaría de Derechos Humanos de la CONADU Histórica [uno de los gremios que agrupa a los docentes universitarios a nivel nacional] vamos a intervenir en la causa y pediremos tener acceso a la investigación que se está llevando a cabo”.
Desde el claustro estudiantil Facundo Ianni, estudiante de psicología y consejero superior de la UBA también se refirió al caso: “existen declaraciones del profesor Casalla que figuran en el legajo de la causa donde afirma que durante los años 74 y 76 depuró ideológicamente el Departamento de Humanidades de la Universidad de Salta y dio de baja a docentes ‘ligados a la subversión’. Consideramos estas declaraciones como una apología del terrorismo de estado y de los años más oscuros de nuestra historia lo cual es inaceptable para un docente de la Universidad Pública” afirmó. Luego agregó: “el día lunes dimos un gran paso al lograr que el Consejo Directivo de la Facultad de Psicología lo separé del cargo. Ahora esperamos avanzar con el juicio académico”.
De esta forma se da un paso importante en acompañar la investigación la complicidad civil con el terrorismo de estado y los crímenes de lesa humanidad. Habrá que esperar sin embargo el desarrollo de la causa judicial y sus resultados.