paramilitarismo

La aparición de cuerpos de jóvenes decapitados en el marco de la represión frente a las protestas, junto a las amenazas contra políticos progresistas, evocan los peores tiempos de la violencia paramilitar en Colombia.

7.132 armas de la guerrilla de las FARC-EP fueron entregadas a la misión de la ONU. Con esto, cumplen su palabra y la sociedad colombiana espera que el Gobierno haga lo mismo: que entregue tierras, democratice el sistema político e implemente sin trucos los acuerdos de La Habana.